Los descalcificadores de sal tiran al desagüe kilogramos de sal en cada ciclo de lavado diario. Esta sal pasa a través de las depuradoras de aguas residuales de nuestro municipio y termina en los ríos de agua dulce próximos a nuestras localidades.

“El jefe de Laboratorio de Aigües d’Elx, Jaime Brotons, explica que los diferentes sistemas de filtrado no están exentos de inconvenientes. Como ejemplo, el de osmosis «requiere un consumo alto de agua, que se desperdicia, ya que por cada litro filtrado, se gastan casi cinco. Además, se pierden minerales». Otro sistema usado frecuente mente son los descalcificadores, que pueden ser perjudiciales para determinadas conducciones, que «se oxidan con mayor facilidad, además de que, si se trata de tuberías antiguas, se puede llegar a beber el cobre y hierro que se desprenda». Por lo que, de tener este sistema, el experto recomienda no ponerlo nunca al máximo. Además, Brotons explica que algunos sistemas de filtrado reducen muchos minerales necesarios y aumentan por ejemplo el sodio, que no es recomendable para muchas personas.

Fuente: M. José Sanmartín 02.11.2016 Diario información